Durante una noche de intensos bombardeos e incursiones terrestres en Gaza, con informes de que las hostilidades continúan, los trabajadores de la salud, los pacientes y los civiles se han visto sometidos a un corte total de las comunicaciones y la electricidad.

La OMS reitera su llamamiento a un alto el fuego humanitario inmediato y recuerda a todas las partes en el conflicto que tomen todas las precauciones para proteger a los civiles y la infraestructura civil. Ello incluye a los trabajadores de la salud, los pacientes, los establecimientos de salud y las ambulancias, así como los civiles que se refugian en dichos establecimientos. Deben adoptarse medidas activas para garantizar que nadie sufra daños para proporcionar un paso seguro por el que los suministros médicos, el combustible, el agua y los alimentos que se necesitan desesperadamente puedan entren en Gaza y distribuirse por el territorio.

Los informes de bombardeos cerca de los hospitales de Indonesia y Al Shifa son sumamente preocupantes. La OMS reitera que es imposible evacuar a los pacientes sin poner en peligro sus vidas. Todos los hospitales de Gaza ya funcionan a su máxima capacidad debido al número de heridos tras varias semanas de bombardeos implacables y no pueden absorber un aumento drástico en el número de pacientes y a la vez dar cobijo a miles de civiles.

Los trabajadores de la salud que han permanecido junto a sus pacientes se enfrentan a suministros cada vez más escasos, sin espacio para nuevos pacientes ni medios para aliviar el dolor. Cada hora que pasa hay más heridos, pero las ambulancias no pueden llegar a ellos debido al corte de las comunicaciones. Las morgues están llenas. Más de la mitad de los muertos son mujeres y niños.

Ni la OMS ni ningún otro organismo ha podido comunicarse con su personal en Gaza. Además, la OMS trata de reunir información sobre las repercusiones generales que afectan a la población civil y a la atención de salud.

La OMS hace un llamamiento a la humanidad de todas aquellas personas que tienen el poder de hacerlo para que pongan fin a los combates ya mismo, en consonancia con la resolución de las Naciones Unidas adoptada ayer, en la que se pide una tregua humanitaria, así como la liberación inmediata e incondicional de todos los civiles que permanecen cautivos.